En el proceso de la evolución de nuestro sistema estelar, el planeta Tierra se separó de la frecuencia del tiempo natural en la que el resto de la vida en el universo estáfuncionando.
La respuesta a esta pregunta tiene mucho que ver con el experimento. de la libre voluntad. Nuestro sistema solar, incluyendo la Tierra (también conocida como Velatropa 24.3), se encuentra en el centro mismo de la “zona de la libre voluntad" galáctica, llamada el sector Velatropa: una región de nuestra galaxia que tiene 6.000 años luz de diámetro, definido por el púlsar denominado Vela. Vela es un remanente de una supernova. Los diferentes errores, o residuos kármicos de errores, de la zona de la libre voluntad han sido depositados en el centro del sector Velatropa.
Este residuo kármico se materializó por primera vez en Maldek, la quinta órbita de nuestro sistema solar y que ahora es el Cinturón de Asteroides, que sostiene la vibración del acorde perdido. Desde Maldek el error fue trasladado a Marte, donde la civilización de Marte también fue arrasada. A continuación, el residuo kármico fue trasladado a la Tierra, Velatropa 24.3. Nos hemos encarnado con el fin de corregir estos errores kármicos y para crear una nueva realidad colectiva.
Cada flujo kármico que corregimos ayuda a reconectar los circuitos de memoria de los mundos perdidos en la mente humana. Todos somos creados del mismo prototipo de humano. Cada uno de nosotros somos una célula de un ser cósmico más grande. Hemos venido para encender todas las células y ayudar a evolucionar a la Tierra hacia una nueva frecuencia, para que así la Tierra no tenga el mismo destino que los anteriores mundos destruidos.
Durante el último ciclo de 5200 años, es solamente en los últimos 23 años que la revelación de la Ley del Tiempo ha sido traída a la consciencia. La función de la Ley del Tiempo es hacer consciente lo que antes era inconsciente.
La Ley del Tiempo, descubierta por el mensajero galáctico Valum Votan, nos ayuda a entender nuestra posición en el tiempo de acuerdo con el Gran Ciclo Maya, que se completa el 21/12/2012. En ese momento la Tierra estará perfectamente alineada con el centro galáctico en la constelación de Sagitario. Un nuevo ciclo comienza entonces. Para cerrar el ciclo y preparar nuestra mente para el nuevo ciclo, se nos ha regalado una serie de herramientas cuatridimensionales.
Estas herramientas ayudan a aumentar nuestra consciencia continua y a poner nuestra mente en una mayor sintonía con otras civilizaciones cósmicas. Estas herramientas fueron liberadas en un ciclo de 20 años, de 1991 a 2011. Los códigos comenzaron a ser liberados en la noosfera en el año 1952 con la apertura de la tumba de Pacal Votan. Un año más tarde, en 1953, José Argüelles tuvo su primera visión en la cima de la Pirámide del Sol en Teotihuacán (Ver 2012: Biografía de un Viajero en el Tiempo).
Todos los códigos y herramientas galácticas se combinan para crear lo que se conoce como la cosmología de la Ley del Tiempo. Esta cosmología confirma revelaciones anteriores y afirma a los diferentes mensajeros y escrituras, incluyendo el Sagrado Corán con su código 19 de la constante matemática del Tzolkin Maya. Actualmente nuestras frecuencias personales y planetarias, así como nuestros patrones de pensamiento, están cambiando. Esto es conocido científicamente como la transición biosferanoosfera. De acuerdo a la Ley del Tiempo, el paso de la biosfera a la noosfera (la esfera mental alrededor del planeta que abarca la biosfera) representa el momento en que la especie humana es restaurada hacia la frecuencia correcta: la frecuencia del tiempo 13:20. Esta es la frecuencia de la telepatía universal. La cosmología de la Ley del Tiempo declara que, para cambiar con la Tierra, tenemos que unificar y unirnos como una sola mente. Este es el significado de la noosfera.
El calendario de 13 Lunas es la herramienta más práctica para sincronizar nuestras mentes diariamente a la frecuencia 13:20. La catarsis de la biosfera también se conoce como la transducción biogeoquímica. Esto apunta a la preparación del próximo ciclo geológico de la Tierra, la Era Psicozoica, a partir del 2013, tras el cierre del Gran Ciclo del 2012. Como preparación para esto, estamos siendo evolucionados, ya no sólo a nivel material, sino también a nivel espiritual/mental donde podemos empezar a participar en el orden de la realidad cuatridimensional.
Toda la vida es una unidad. El despertar del alma de la Tierra es el despertar de nuestra propia alma como una consciencia unitaria. “SOBRE ELLO ESTÁ EL DIECINUEVE”
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